Cualquier usuario de bienes y servicios tiene derecho a reclamar si no está satisfecho con el producto o servicio que ha consumido o comprado. Este derecho le ofrece la potestad de recibir un producto acorde a lo que contrató, con independencia de lo que sea. Los seguros de salud no son una excepción y, por eso, cuando en la relación entre aseguradora y asegurado surge un problema o queja, ya sea por la tramitación de un siniestro o sobre cualquier otro aspecto, los consumidores tienen derecho a reclamar en caso de no estar satisfechos con el servicio prestado.
La primera vía ante cualquier problema es recurrir al departamento de atención al cliente. Sin embargo, también existe la figura del Defensor del Asegurado, un servicio regulado donde se atienden y resuelven quejas y reclamaciones. Es conveniente que el servicio este externalizado con el fin de garantizar siempre la transparencia y la protección del cliente.
PROMEDE como persona jurídica actúa con independencia respecto de la entidad que suscita o genera la reclamación o queja. Al ser ajena a su organización, toma las decisiones con total autonomía en cuanto a los criterios y directrices atribuibles en el marco de la legislación aplicable y actuando de acuerdo con el código de conducta ética de la empresa. Dentro de los matices que conlleva esta figura destaca que las decisiones del Defensor del Asegurado favorables al reclamante vincularán a la entidad en cuestión. Esta vinculación no será obstáculo a la plenitud de la tutela judicial, al recurso a otros mecanismos de solución de conflictos, ni a la protección administrativa.
Por último, en nuestra Compañía se elabora una memoria anual de quejas y reclamaciones que han sido planteadas en este departamento y un resumen anual de actividad, que posteriormente presentamos a la entidad objeto de la reclamación o queja.
En PROMEDE sabemos de lo que estamos hablando, porque desde hace 10 años somos una entidad designada como Defensor del Asegurado de diversas compañías aseguradoras. Nuestro objetivo es ofrecer un servicio integral en cuestiones relacionadas con la resolución de las reclamaciones de sus clientes, respecto a sus derechos e intereses.