Cualquier usuario que haya sufrido un daño por un retraso o error en el diagnóstico, prescripción inadecuada o cualquier otra actuación médica puede presentar una reclamación siempre que considere que esa decisión se aleja de los estándares médicos exigibles y han causado un daño físico o moral a su persona.
Para poder medir y clasificar el daño existen médicos especialistas, conocidos como peritos médicos, que tienen conocimientos tanto en medicina como en derecho y conocen a la perfección la operativa de los tribunales. Ellos son los encargados de evaluar el daño, demostrar que existe un nexo causal y, además, de realizar una valoración para ver si la actuación del profesional es acorde a los criterios médicos teniendo en cuenta las normas recogidas en los protocolos vigentes.
En este punto, es importante que durante el proceso se realice un informe pericial para determinar el tiempo de curación, tratamiento y, sobre todo, la indemnización o prestaciones sociales que recibirán en cada caso. En este documento el perito debe explicar de forma minuciosa todos los elementos que existen como prueba para fundamentar la resolución de un juez (si la asistencia se ha llevado a cabo bajo los protocolos existentes, si ha tenido una repercusión laboral, lesiones o secuelas, entre otros aspectos).
En PROMEDE somos conscientes de la importancia que tienen este tipo de dictámenes, por ello, contamos con un servicio de expertos que disponen de los conocimientos para la emisión de este tipo de informes periciales, en distintos ámbitos de actuación.
Además, es importante destacar que entre los principales servicios que ofrecemos están aquellos informes de evaluación inicial (viabilidad y orientación); informes de análisis pericial con uno o varios especialistas médicos; baremaciones de secuelas por médicos especialistas en Valoración del Daño Corporal; promociones de la mediación; o ratificaciones y defensa de los informes en sede judicial, entre otros.