Se observa que existe un déficit de profesionales formados en esta área y se estima que es necesario que exista un 35% más para ahorrar tiempo en los procesos y costes en la resolución de los conflictos sanitarios. Hoy hablamos con Pedro Casado, coordinador del Máster de valoración de daño corporal, pericia médica y resolución extrajudicial de conflictos de responsabilidad sanitaria, sobre la importancia de la figura del perito médico con motivo de la ampliación del plazo de matriculación del máster hasta el próximo mes de enero.

¿Cómo valora el número de especialistas que hay en nuestro país en el ámbito del peritaje médico?

Si analizamos la información que nos transmiten las Compañías y la realidad de la actuación en el ámbito del peritaje judicial, lo cierto es que hay una importante carencia de peritos médicos en España. Se necesitarían 400 peritos médicos más (35% más de los actuales) para dar respuesta a la demanda que existe de este perfil profesional. Partiendo de ello y de que el informe médico pericial es el medio auxiliar con el que cuenta el juez en el esclarecimiento de la verdad o como decía Ambrosio Paré “… los jueces deciden según se les informa”, podemos afirmar que de la realización de la pericia se desprenderá una serie de consecuencias específicas y de relevancia jurídica, no solo el pago de una importante cantidad de indemnización, sino el posible ingreso de una persona en prisión, o la concesión de una invalidez o incapacidad. Esta afirmación por supuesto debe ir en íntima relación con el juramento hipocrático, que obliga a ser sinceros.

¿El peritaje puede ser una salida profesional para diferentes especialidades?

El peritaje no solo puede resultar interesante para una especialidad sanitaria en concreto, o para varias, sino que puede configurarse, o bien como una salida tan digna y relevante como cualquier profesión sanitaria de carácter asistencial, o bien como un complemento al ejercicio de la medicina asistencial.

Es decir que el peritaje no está enfocado a una especialidad sanitaria concreta, sino que la práctica judicial nos pone de manifiesto que cualquier especialidad puede ser necesaria a la hora de formular y defender en juicio un peritaje.

¿Qué aspectos diferenciales tiene este máster?

La diferencia de otras formaciones es que consigue aunar en un mismo programa la pericia sanitaria, con las técnicas propias de esta labor, el conocimiento judicial y legal necesario y la valoración del daño. Si analizamos el programa del máster, todos los módulos resultan atractivos y relevantes. Si bien yo destacaría fundamentalmente que, a diferencia de otros máster en los que se analiza exclusivamente el daño corporal, aquí además de la valoración, teniendo en cuenta el nuevo baremo, se introducen dos conceptos novedosos: la pericia médica en relación a la responsabilidad profesional sanitaria específica y, por otro lado, la mediación y resolución de conflictos de responsabilidad sanitaria. Se trata de un módulo relativo a la gestión extrajudicial de conflictos que viene erigiéndose como una alternativa especialmente adecuada para resolver los conflictos en el ámbito sanitario.

Por último una de las peculiaridades más relevantes de este máster se refiere a la existencia de un primer módulo de contenido jurídico configurado por Ricardo De Lorenzo, presidente de la Asociación Española de Derecho Sanitario, que constituye la base para el posterior estudio de los 3 módulos.